Pastora Soler la lía parda

Nuestra representante en Eurovisión ha venido a decir que no convendría ganar el concurso por los gastos que dicha victoria conllevaría. No debe haber visto las pasadas ediciones... ¡Llevamos años sin ser los ganadores!

"Me dicen 'por favor, no vayas a ganar. Antes, tenemos que salir de la crisis y del bache'...". Estas han sido las palabras que Pastora Soler ha pronunciado en una entrevista en el programa La nit en blanc en ABC Punto Radio. Y claro, ya han saltado las alarmas de los eurofans, que además las tienen sincronizadas, y la pobre ha tenido que rectificar: "Ningún directivo ni la gente que me acompaña de TVE me ha dicho eso. El apoyo y la ilusión de TVE es total desde  el principio".

Eurofan al enterarse de las palabras de Pastora

Ah bueno, ahora ya estamos todos más tranquilos. Gracias a su aclaración, el próximo sábado 26 de mayo podremos sentarnos en familia ante el televisor para ver la gala. Que dicho sea de paso, tiene pinta de ser de las que no se olvidan. La ciudad encargada de acoger tan freaky espectacular evento es Bakú (Azerbaiyán) y acaba de confirmarse que ya no quedan entradas para entrar en el Crystal Hall, el recinto que acogerá la gala. Un lleno total, vamos. Igual influye eso de que acaban de descartar su candidatura a los Juegos Olímpicos de 2020.

Los coches de los eurofans no dan abasto

Si os digo la verdad, tengo ganas de verla. Sin dinero para poder ir al cine a ver alguna comedia es el plan más barato para reírte un rato. ¿Qué por qué digo esto? Además de por ver a España hacer el ridículo brillar ante toda Europa, no me perdería por nada del mundo la actuación de Rusia. Se acabaron las rubias cañón, ahora la edad es un grado. 

El grupo Buranovskiye-babushki está formado por seis entrañables abuelas que han compuesto una canción ethno-pop, como ellas mismas definen. ¡Ay mi madre! Que se prepare Youtube para acoger miles de vídeos de estas ancianitas minutos después de su actuación. ¡Esto huele a millones de visitas!

Cruel o no, lo cierto es que Eurovisión ha perdido el glamour de Massiel y el encanto de Sergio Dalma. Amigos, yo voto por recuperar la OTI. ¿Qué me decís?